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Arquitectos: Cabrera Arqs
- Año: 2022
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Fotografías:Michelle G, Enrique Cabrera, Tamara Uribe, Santiago Heyser
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ikal, cuyo nombre en maya significa "viento" o "espíritu", es un espacio arquitectónico dedicado a la meditación y la contemplación de la bóveda celeste nocturna. Es un lugar de búsqueda del espíritu, un refugio donde los individuos pueden encontrarse a sí mismos bajo la luz de las estrellas. Arquitectónicamente, Ikal se presenta como un observatorio nocturno, un cilindro de chukun de 9 metros de diámetro que, durante el día, enmarca los cielos azules de la península de Yucatán y, por la noche, se ilumina con estrellas que parecen luciérnagas danzando en el espacio arquitectónico.
Diseño y Estructura: El cilindro de chukun que constituye Ikal está cuidadosamente protegido por una envolvente de piedra de albarrada, dispuesta de manera que se integra perfectamente con la superficie lisa del chukun. Esta estructura genera una serie de taludes que vinculan el espacio arquitectónico con el entorno natural circundante. El acceso a Ikal está marcado por un plano ligeramente inclinado que guía a los visitantes después de atravesar un piso de piedra.
Este acceso está enmarcado por una cuerda de albarrada que parece desprenderse de la envolvente del edificio, creando un efecto visual de continuidad entre el espacio exterior e interior. Espiritualidad y Contemplación: El diseño de Ikal tiene como objetivo capturar el espacio y generar un ambiente místico y lleno de energía.
La combinación de materiales naturales como la piedra y el chukun, junto con la disposición cuidadosa de la iluminación estelar, crea un ambiente propicio para la contemplación y la conexión espiritual. La presencia de la constelación de Casiopea sembrada en forma de Chakas en la plaza circular exterior añade un elemento simbólico y mágico al espacio, invitando a los visitantes a explorar las maravillas del universo mientras se sienten conectados con la tierra.
Ikal desde el Cielo: Desde una perspectiva aérea, Ikal se asemeja a un impacto de asteroides en la zona del "cráter de Chicxulub", una reminiscencia de la conexión eterna entre el cosmos y la tierra. Su piso de piedra parece fusionarse con la geología ancestral del lugar, simbolizando la continuidad del tiempo y la importancia de la observación estelar a lo largo de la historia humana.
Ikal es más que un observatorio de estrellas; es un portal hacia el infinito, un lugar donde el espíritu humano se encuentra con el vasto universo. Este espacio místico invita a los visitantes a sumergirse en la contemplación, a encontrar la paz interior y a maravillarse ante la inmensidad del cosmos. En Ikal, el viento y el espíritu se entrelazan, creando un santuario atemporal donde la conexión entre el hombre y el universo se revela en todo su esplendor.